lunes, 31 de diciembre de 2012

Años



Hoy se acaba el 2012. Nos desearemos unos a otros venturas y felicidad. Hablaremos de lo rápido que pasa el tiempo y repetiremos esos lugares comunes de las nocheviejas.

Los años se acumulan o se pierden. Mejor sumar, pero no de cualquier manera.

Hoy ha muerto la neuróloga y premio nobel Rita Levi -Montalcini, tras vivir 103 años. Una mujer impresionante. Sus únicos méritos, decía, han sido la “perseverancia y el optimismo”. Nunca se jubiló. “El cuerpo se arruga”, comentaba, “pero no el cerebro”. Y la inacción, el desencanto, la desmotivación, “arrugan” el cerebro.

Ella, que conocía el cerebro muy bien, tenía claro que no quería seguir viviendo cuando el suyo dejara de funcionarle eficientemente. Así lo explica en una entrevista que dio a El País, en 2009, cuando cumplía 100 años. ¿Cuánto desearía vivir? –le preguntaban- “El tiempo que funcione el cerebro – respondía-. Cuando por factores químicos pierda la capacidad de pensar, dejaré dicho en mi testamento biológico que quiero ser ayudada a dejar mi vida con dignidad. Puede pasar mañana o pasado mañana. Eso no es importante. Lo importante es vivir con serenidad, y pensar siempre con el hemisferio izquierdo, no con el derecho. Porque ése lleva a la Shoah, a la tragedia y a la miseria. Y puede suponer la extinción de la especie humana”.

Quizá a los 103 años la muerte no sea importante, antes de eso sí lo es. Y las pérdidas que conlleva el paso del tiempo son vividas con angustia por casi todos.

De las 123 entradas de este blog, la más leída es la referida a Nacha Guevara y su hermosura. Nunca lo habría pensado cuando la escribí. Tengo que agradecer a Nacha unos cuantos lectores del otro lado del Atlántico.

Está tan milagrosamente atractiva que no deja indiferente a nadie, y ella explica y repite que la clave está en el espíritu: "Porque uno es mucho más que su edad- dice-. Y hay una edad cronológica, una edad biológica, una edad mental y una edad emocional. Un promedio de todas te dará lo que sos. Pero claro ningún cirujano va a hacer el milagro de darte una mente de pensamientos jóvenes. Ese es tu trabajo".

Por lo visto, ha hecho muchos cursos (el curso del guerrero espiritual, el de la ley de atracción, el poder de las emociones, las técnicas subliminales...), y además es instructora de meditación con Deepak Chopra. Escuchemos a Nacha: "Cuando la mente está ocupada siempre en lo que cambia, en lo que cae, en lo que envejece, en las horas que pasan, el cuerpo obedece a esa actividad de la mente. Cuando uno ha aprendido desde hace muchos años a establecer la mente en el lugar donde tiempo y espacio tienen leyes diferentes, el cuerpo también lo siente. Así que yo no vivo pendiente del tiempo en este sentido".

En honor a la mujer que más lectores ha atraido hasta mi blog, he buscado en la red información sobre Deepak Chopra. Para mí era un desconocido, pero es sólo porque soy una ignorante. Hay un montón de libros, audioguías, frases y vídeos de este gurú que promete un cuerpo si edad. Lo que más me ha gustado leer es este reportaje sobre una de sus "actuaciones" en un hotel argentino.

Y digo yo que si tanta gente escucha, lee, paga y sigue sus consejos y sus cursos, visita su centro de California... ¿Por qué no están tan estupendos como la Guevara? ¿Si la ley de la atracción, la curación cuántica y la espiritualidad son la solución anti envejecimiento por qué se siguen forrando los cirujanos plásticos?

Nacha Guevara es vegetariana y medita todos los días. Estoy segura de que esa manera de vivir tan saludable es beneficiosa para su apariencia. Pero si el espíritu es la clave ¿Por qué se estira la piel¿ ¿Cuántos liftings se ha hecho?

martes, 25 de diciembre de 2012

domingo, 23 de diciembre de 2012

Un día después del fin del mundo

Escribir el día después del fin del mundo da morbo. Es como sentirse superviviente de un naufragio inventado.

La verdad es que por aquí ha salido el sol y el día ha sido precioso y limpio. Aunque no tengamos más dinero, ni más de nada que ayer.

Ha habido bromas con el tema hasta en los telediarios. Para estar tan seguros de que era mentira se le dedicaba demasiada atención. Si lo pensamos, lo que nunca pasó y lo que no ocurrirá llenan mucho tiempo de nuestras conversaciones.

Los comentarios sobre la dichosa predicción me han servido para darme cuenta de que algunas personas sienten que el mundo se les acaba por cualquier cosa. Los hay que no saben que hacer con su tiempo vacacional y prefieren la rutina del trabajo. O los que siendo golosos profesionales les hunde que les diagnostiquen diabetes. Sin embargo, el planeta no vemos que se hunda. Creemos ciegamente en que siempre habrá otra oportunidad.

La idea del apocalipsis la hemos llevado al terreno doméstico y cercano y nos nos impresionan los grandes finales. Es nuestro egoista bienestar lo que nos motiva.

Como si supieramos que nuestros pequeños mundos han tenido finales varias veces; tantas como cambios sorpresivos y dolorosos hemos sufrido. Un novio que te deja de querer, un despido, un aborto indeseado, una enfermedad que da miedo, una ausencia para siempre... y todo cambia. Aunque el mundo, como dice la vieja canción italiana, siga girando.

No sirve de nada ponerse trascendentales. Cuando se acabe de verdad no habrá aviso.


Il mondo. Jimmy Fontana



domingo, 9 de diciembre de 2012