sábado, 31 de diciembre de 2011

En defensa de lo público

Me tiene de los nervios que la gente no sea consciente del riesgo que conlleva este desprecio, tan de moda, por el sector público.

Mis amigas, mis conocidos y yo, todo mi entorno, somos hijos de la educación subvencionada y de la sanidad universal. La gente de mi generación es quien es porque nació en la parte del mundo donde el Estado proporciona servicios sociales que reducen o amortiguan las desigualdades. No tengo amigos ricos.

Mi vida, la de todos nosotros, habría sido muy distinta de haber comenzado en México, India, Arabia Saudí o Estados Unidos. A no ser que hubiéramos pertenecido a la élite económica de esos países, algo con lo que no cuento- cuando veo películas de época siempre me imagino de criada o cortesana, nunca de marquesa, debo tener la sangre demasiado roja- nosotros no habríamos llegado nunca a cursar estudios universitarios, ni habríamos leído la cuarta parte de los que hemos podido encontrar en las bibliotecas. Nuestros padres y abuelos nos habrían dejado huérfanos mucho antes, sin posibilidad de tratarse sus cánceres, diabetes, cataratas, hernias y demás calamidades.

Estoy harta de los “pringados” que ríen la gracia al presidente de los empresarios españoles y extienden la intoxicación patronal contra empleados cualificados que consiguen su plaza por oposición. La intención final es eliminar funcionarios para poner a las empresas privadas a gestionar el dinero público De hecho, ya tenemos a un antiguo presidente ejecutivo de Lehman Brothers como nuevo ministro de economía. Un tiburón financiero, de los que piden recortes a otros para aumentar sus beneficios, va a dictar la política económica.

Contagiarse del neoliberalismo conservador no es un buen negocio para los pobres. Ah! el problema es que nadie se considera a sí mismo pobre, ni proletario, ni obrero; se me olvidaba que somos clase media… Claro. Espera que te echen en una reconversión cualquiera, conviértete en parado de larga duración y cuando se te acabe el subsidio ten un problema de salud –nadie está libre- que precise de una intervención costosa-. En dos años con el sistema “sálvese quien pueda” verás que lejos te queda la clase media.

Otros consiguieron para nosotros derechos que nos estamos dejando arrebatar mientras nos entretenemos en discutir quién es más “privilegiado”.

No tengo amigos ricos pero nunca he leído que quieran igualarse por abajo. Admiran al que mejor vive y le quieren imitar. Nosotros no. Al final va a ser verdad que de los colegios de pago salen más listos….

viernes, 30 de diciembre de 2011

domingo, 18 de diciembre de 2011

lunes, 28 de noviembre de 2011

El optimismo obligatorio nos acosa

Acabo de leer un libro que me ha entusiasmado. Se trata de "Sonríe o muere. La trampa del pensamiento positivo" de Barbara Ehrenreich. Es una autora que ya conocía por otra obra que también recomiendo "Por cuatro duros. Como NO sobrevivir en los EEUU". (En este recogía sus experiencias en trabajos poco remunerados, como parte de una investigación sobre las condiciones laborales de las clases trabajadoras de Estados Unidos). Pero volviendo a lo que me interesa ahora -la crítica al pensamiento positivo-, el libro es una denuncia muy documentada de la influencia negativa que el pensamiento positivo ha tenido y tiene en la sociedad estadounidense. (Y de rebote en la nuestra, claro)

Ehrenreich dice que: "El pensamiento positivo es en realidad un brillante método de control social, ya que anima a la gente a pensar que no hay nada malo en el sistema (la economía, la contaminación ambiental). Y que lo que está mal tiene que ver con usted, con la actitud personal de cada uno".

En el siguiente vídeo - con subtítulos en castellano- se puede escuchar a la escritora comentar su libro y defender sus argumentos.



A mí, como a Ehrenreich, me gustan los protestones. Y tengo claro que igual que la gente tóxica es perjudicial, quitar importancia a los problemas ajenos es una manera cruel y refinada de hacer de menos. (El "no llores tonto, que no es nada" que algunos adultos sueltan a los niños en vez de ponerse en su lugar para entender "eso" que a los ojos del pequeño es un drama).

Por cierto, “El secreto” es el libro que más se presta en la biblioteca en la que trabaja una amiga. La lista de espera es larga. Me dice que ella ya sabe quién va a solicitarlo sólo con verles la cara. Todos tienen pinta de necesitar que alguien les diga que hacer con su vida.

"La pobreza es un fracaso del individuo". "Si estás en el paro siéntelo como una oportunidad". "Te mereces más y puedes conseguirlo si de verdad lo deseas"... Cuando escucho frases de ese pelo, me entran ganas de salir corriendo y huir. Porque el optimismo obligatorio puede ser algo más que una broma de mal gusto. Sólo tenéis que ver esta escena de "Tutta la vita davanti" película dirigida por Paolo Virzi en 2008. (Argumento: Marta, joven licenciada en Filosofía, sólo encuentra trabajo de teleoperadora, vendiendo robots de cocina. Entra en un mundo de precarias condiciones laborales, con técnicas de venta agresivas y actividades de motivación que se parecen mucho al mobbing). Un call center de pesadilla. Aquí la canción de bienvenida al trabajo...




sábado, 19 de noviembre de 2011

Los bancos toman el poder

Nunca pensé que fuera a sentir rabia por el despido de Berlusconi. Y la siento. Me alegré mucho un rato pero se me pasó enseguida porque no es el pueblo italiano, con sus votos, quien le ha echado sino el poder financiero. El bufón ya no les divertía. “Los mercados” necesitan a alguien más serio. Y todos nos quedamos mirando al personaje, cuando lo que menos importa es quién sea –aunque con Berlusconi cueste obviarlo- sino lo que hace, y porqué está donde está. ¿Por qué es Monti el primer ministro de Italia? ¿Por qué Papademos ocupa el mismo puesto en Grecia? Los definen como “independientes”, profesionales sin ideología, pero les han colocado ahí para aplicar la receta neoliberal y eliminar el debate político.

Dos años llevan los griegos ocupando plazas y calles para decir que eso no. Que el que ha robado pague pero que no repartan las pérdidas entre todos. Ni Papandreu ni Papademos. Los despidos y recortes da igual quien los lleve a cabo, el político corrupto o el tecnócrata.

Mañana en España ganará Rajoy o, si todas las encuestas se equivocan, Rubalcaba. Da igual. ¿Acaso no se van a dedicar ambos a obedecer los dictados del sistema financiero? Ese es el programa que la Unión Europea marca para superar la crisis a la que nos llevaron la avaricia y el mal funcionamiento del sistema financiero. Los mismos que lo jodieron se postulan para arreglarlo. Y si para ello tienen que cargarse lo que sea se lo cargan. Hasta su propia definición de democracia –el gobierno de la mayoría- ha caído en desgracia.

Y en ese ambiente de preocupación por la prima de riesgo y la histeria de los mercados a algunos les entra la tentación de pensar que todo es lo mismo. Y ponen toda su confianza en ganar la lotería. El lunes seguirán mostrando su indignación ante la máquina de café. Yo no creo que sea inútil votar. Sólo hay que elegir a alguien que se plantee que hay alternativas y que sea capaz de ofrecer resistencia. Porque protestar siempre es más útil que resignarse.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Con tanta noticia importante...

...como está sucediendo en estos días. Y a mí me pilla fuera de mi pueblo, en otra realidad.(No he sido la única).

Leo y leo periódicos atrasados y me viene al recuerdo, y a las ganas, esta canción de Mikel Laboa. Con letra de Joseba Sarrionandia.

Oroitzen zaitudanean, ama
sukaldean egoten zara
mahaia bostentzat iminita,
aulkian eseri eta
leihotik begira,
kristala lausotzen duen
lurrina kendu gabe,
eta ni -badakit-
zeure begien hondoan nagoela


viernes, 14 de octubre de 2011

domingo, 2 de octubre de 2011

Adiós al verano

Ya viene la noche de nuevo. He esperado hasta octubre para despedirme porque me resisto a entrar en el invierno. Como la eterna estudiante que soy, para mí el año sólo tiene dos estaciones: la del curso y la de las vacaciones. El resto, se reduce a colocarse encima más o menos ropa.

Me cuesta horrores desprenderme de los días largos y de las horas de luz. Siempre he sentido que las penas al sol son menos penas. Y pronto saldremos de casa a oscuras y regresaremos igual. Sólo quedarán las fotos para recordar el calor.

Este verano he aprendido a admirar a las señoras con gorrito. En las playas -donde me gustaría vivir siempre- no hay photoshop y los cuerpos se desmoronan, se desparraman en toda su humanidad. Cuando aún tienes la carne tersa es duro comprobar en qué te convertirás (si tienes la suerte de llegar a vieja). Pero este año he observado al detalle a las señoras más mayores. Mujeres feas, de 70 u 80 años, que van a la arena con su silla y su gorrito. Me han parecido felices. Como poseedoras de un secreto. Quizá han descubierto algo que las demás aún no sabemos.

Espero llegar a ser una señora con gorrito aunque para eso tenga que pasar por unos cuantos inviernos.

Bien pensado, de noche también pasan cosas interesantes.

sábado, 24 de septiembre de 2011

Censura previa no disimulada

Tremendo lío se montó en un par de horas tras acordar el Consejo de RTVE que se auto adjudicaba el derecho de controlar el sistema de edición de noticias de los telediarios de la tele pública. Sólo dos consejeros se opusieron (representantes de IU y UGT). El resto dieron paso a la propuesta del PP, bien con votos a favor (PP y CiU) o bien con abstenciones (PSOE, ERC y CCOO). Luego, ante el escándalo, salieron los cabezas de lista de todos los partidos diciendo que, por favor, a quién se le ocurre, ellos -todos- están en contra de la censura y a favor de libertad de prensa. Y se pusieron a hablar de la imparcialidad sin decir realmente lo que piensan: "Imparcial es lo que me beneficia".

Lo que más me llamó la atención -y ha pasado un tanto inadvertida- es la información aparecida en El País digital sobre los que nos cuestan estos consejeros. Son doce, el cargo dura seis años, cobran 120.000 euros anuales y tienen derecho a disponer de un coche oficial con conductor, un asesor y una secretaria. Y cuando se discute sobre el ahorro del gasto público ¿por qué no se habla de esto en vez de enfocar el debate hacía si los profesores tienen que trabajar dos horas más o dos horas menos? ¿Por qué no se dirige el furor de los ciudadanos hacía las prebendas de ciertos cargos y el desequilibrio entre la responsabilidad asumida y el coste económico que se destina? Pues, precisamente porque la censura existe.

Existe y está enraizada en la toma de decisiones. Y los profesionales de la comunicación lo saben y no pueden hacer gran cosa si quieren trabajar en según qué medios. Una llamada al director de informativos disuelve muchas dudas éticas. Algunos políticos, siguiendo su lema de "imparcialidad es lo que me beneficia", quieren que además la censura sea legal, se contemple en un texto escrito y no haya ni posibilidad de criticarla. Era la tercera vez que la representante del PP lo intentaba. La derecha no se corta nada. No sienten que tengan que disimular ni arrepentirse. Se gustan como son.

También el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, se muestra sin complejos. En el tema de Kukutza, el gaztetxe de Errekalde derribado este fin de semana, habla en nombre de los bilbaínos como si todos fueran él mismo. Pero el colectivo que trabajaba en Kukutza también formaba parte de Bilbao, aunque seguramente no le voten. Y tenía un reconocimiento social que algunos medios de comunicación se esfuerzan en ignorar. Claro, ahora estamos en el momento de las justificaciones. Que si no se dejaban desalojar, que si la propiedad privada, que si la ocupación, que si el auto judicial... Lo cierto es que Kukutza era lo que se puede ver en este vídeo y ahora es un solar. Y las negociaciones y las soluciones siempre tienen que ser anteriores a la Policía. Porque la Policía nunca es la solución. Pero esa es una idea que no pasa la censura.


viernes, 16 de septiembre de 2011

Sobre la espuma que nos cubre la lucidez

Un vídeo con una intervención de José Saramago: frente a un mundo para el disfrute de los ricos propone la conciencia.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Un punto de vista lejano

Dicen los defensores del relativismo a ultranza que todo depende del punto de vista. Cada persona tiene diferentes perspectivas y “defiende su verdad”. Y si no recuerdo mal, el bueno de Don Quijote le explicaba a Sancho que sólo dos linajes hay en el mundo: el tener y el no tener. Sin llegar al relativismo, seguro que todos estamos de acuerdo en que la perspectiva, el punto de vista, es fácil que varíen según se tenga o no se tenga. Esto vale para hablar del amor, del dinero, del conocimiento…

Viene a cuento porque hoy se han hecho públicas las declaraciones sobre las retribuciones de los parlamentarios. Así hemos sabido que nuestros políticos no viven de alquiler, algunos tienen varias viviendas y bastantes, ninguna hipoteca. Son gente con suerte. Alejados del sinvivir de la subida de los intereses y de las quejas del mileurista. Y a mí me parece estupendo que los representantes públicos estén bien pagados y no tengan tentaciones para la corrupción, ni necesidades de ella. Que algunos tienen propiedades porque las han heredado..., pues que lo disfruten. Ya se sabe: sólo el que tiene padrino se bautiza.

No sé si vivir tan lejos de las preocupaciones mundanas no les hará también sentirse ajenos a las soluciones, pero no es eso lo que me ha escocido hoy, y tampoco el afán cotilla del personal que ha colapsado la web del congreso para saciar su curiosidad sobre el patrimonio de los parlamentarios. ¡Ojalá nos preocupara más lo que hacen que lo que tienen!

Lo que me parece denunciable y una vergüenza mayúscula –desde cualquier punto de vista que lo vea- es que, del dinero de todos, se le pague una mensualidad de 2.061 euros a un señor que fue procesado por su implicación en los GAL y condenado por el secuestro de Segundo Marey. Y que además ese “complemento de ingresos” que así es como lo llaman, se lo haya concedido la Mesa de la cámara de forma “graciable”. O sea, que de ninguna manera a García Danborenea le correspondía cobrar semejante cantidad por su trabajo como ex parlamentario (al parecer, no lo fue el tiempo suficiente para cobrar eso que denominan pensión parlamentaria). Se lo concedieron como medida de gracia. ¡Maldita la gracia!

lunes, 29 de agosto de 2011

sábado, 13 de agosto de 2011

Slow is beautiful

Mañana voy a tomar dos aviones, un tren y un autobús para llegar a un lugar en el que pasaré unos días de vacaciones. Eso sin contar los trayectos de mi casa al aeropuerto y los traslados entre estaciones. O sea, en catorce horas haré tantos kilómetros y me situaré tan lejos de mi lugar de origen que si mi abuela –cuyo viaje más largo fue la luna de miel a la provincia de al lado- estuviera viva no podría creérselo.

Al principio había escrito unos “días de descanso” pero lo he cambiado por “días de vacaciones”. Es difícil imaginar que vaya a llegar muy descansada. Sin embargo, voy contenta porque me encanta viajar. Especialmente en avión, que me lleva lejos en poco tiempo.

¿Caigo en una contradicción si digo que uno de los objetivos de estas vacaciones es conectar con mi tortuga interna? Pienso hacerlo todo con mucha calma. Y todos los días dedicaré largo rato a no hacer nada. Sin miedo a perder el tiempo. No en vano acabo de leer el libro de Carl Honoré “Elogio de la lentitud”.

Los teóricos de la lentitud apuestan por impulsar un cambio de prioridades y conseguir que los bienes materiales sean menos importantes que contar con tiempo suficiente para disfrutar de la vida. Empezaron por defender la comida de verdad frente al fast food y, poco a poco -no podía ser de otra manera-, el movimiento slow ha ido ganando terreno.

Yo me he apuntado a esta terapia contra la prisa. Si alguien quiere empezar a bajar el ritmo y no sabe cómo aquí tiene unas pautas. Y una pregunta: ¿Cuánto tiempo de ese que “no tenemos” dedicamos a ver la tele?

Cómo Practicar la Vida Slow
Desarrollar un pasatiempo o hobby tranquilo.
No pretender hacer todo de una vez.
Mirar poco el reloj: Los fines de semana levantarse de la cama, respetando los ritmos naturales del sueño, en lugar de poner la alarma.
Hacer las compras en un mercado de productos frescos.
Comer tranquilo: Saborear la comida, apagar el televisor y disfrutar de la compañía de alguien.
En vacaciones: Bajar el ritmo; no intentar conocer o recorrer todo lo que agradaría visitar.
Limitar la lista de cosas pendientes: Tomarse el tiempo necesario para las personas y actividades con las que se disfruta.
No ver tanta televisión: Hay estudios que indican que las personas ven ocho años de televisión durante toda su vida.

lunes, 8 de agosto de 2011

Los mercados no son Dios

El periódico Gara ha ofrecido una entrevista muy interesante con Susan George, presidenta de la red mundial de investigadores Transnational Institute (TNI). Dice cosas que no se escuchan en los telediarios y que conviene no olvidar. Destaco dos.

Una: La causa de la actual crisis de la deuda europea es que los gobiernos han asumido las deudas de bancos privados, que estallaron con la crisis financiera. Banca privada, es decir que tiene dueño, personas con nombres, apellidos, caras y un objetivo: enriquecerse a costa de lo que sea.

Las voces oficiales andan dando la barrila con que si hemos gastado más de lo que teníamos, que si hay muchas autonomías y demasiados funcionarios. Que somos unos irresponsables y no sabemos de economía doméstica. Son persistentes en la descalificación moral porque esperan que nos creamos merecedores del castigo: recortes salariales, privatizaciones de servicios, eliminación del gasto social, pérdida de derechos laborales que costaron generaciones conseguir… Tenemos que sentirnos culpables y aceptar que hemos sido malos. Pues no. Pongámoslo en negrita para que se vea mejor: deuda de la banca privada que vamos a pagar a escote.

Dos: Los rescates no funcionan. Grecia es la muestra. El gobierno socialista no hace más que aceptar condiciones que estrangulan más y más su economía y los griegos no salen del agujero. Lo ve cualquiera, pero qué hace Europa. ¡Ay, Europa! Como una sanguijuela no ha curado pongamos más, a ver si hace efecto. Segundo rescate. Estrujemos más a los griegos. No sé, pero me parece que a los islandeses –que se plantaron y se negaron a pagar- se les ve más tranquilos.

Algunas civilizaciones antiguas ofrecían sacrificios humanos a los dioses para aplacar su ira. Ante lo inexplicable, ante lo misterioso e incontrolado, las sociedades arcaicas mataban a algunos miembros de su comunidad con la esperanza de que la suerte cambiara a mejor. Eso nunca ocurría, claro. O no como consecuencia del asesinato consentido, pero la maniobra era claramente beneficiosa para la perpetuación del sistema. Efectuada la ofrenda, todo se mantenía igual.

Esto suena parecido. La supervivencia del sistema nos a costar la vida. Los mercados y las personas que los conforman tienen un interés claro y confeso: ganar más y más dinero sin hacer otra cosa que manejar el que ya tienen. Porque no producen nada. Sólo especulan para su propio interés. Nos sacrificamos todos para que puedan jugar con su monopoly gigante (ahora retiro de aquí y pongo allí y en esta casilla impido el paso).

Me niego. Los mercados no son Dios, ni las agencias de calificación de riesgos son el oráculo de Delfos. Son organismos interesados que marcan las cartas y cambian las reglas del juego en mitad de la partida ¿Y los gobiernos de qué parte juegan? Eso sí que lo muestra la tele. Hay muchas películas en las que aparecen súbditos de monarcas absolutos con tal devoción por su rey que le deseaban larga vida hasta cuando los enviaba al cadalso. Así era en el Antiguo Régimen: la voluntad del intocable rey no se discutía. Hasta que la Revolución francesa demostró que los reyes también tienen cuello y la guillotina los sesga con la misma facilidad que el resto.

Igual necesitamos una guillotina para la banca y el sistema financiero.

sábado, 30 de julio de 2011

jueves, 28 de julio de 2011

Desde la parte buena del mundo

Llevo días quejándome por el exceso de lluvia y nubes. Tanta humedad me saca musgo en el ánimo. Lo tengo todo verde y constipado. Aunque en esta parte del año lo que me tocaba era lucir un humor bronceado y lleno de energía. En consecuencia, como demasiado chocolate.

O sol o chocolate. Mis necesidades no son nada sofisticadas.

Andaba yo en estas banalidades, propias de la gente sin problemas graves -y que dure- cuando un extremista fundamentalista noruego se lió a matar adolescentes, dejando a la vieja Europa y a sus habitantes horrorizados.

El autor de la masacre ha confesado no sentirse ni un poquito culpable. Se planteó la matanza como una operación de marketing para su ideario ultra. Y le ha funcionado porque además del sufrimiento y de dejarnos a todos sin aliento ya se habla de lo que él quería. Me maravilla y me admira la actitud del pueblo noruego. El primer ministro declara que la solución es más democracia. Nada de pedir la pena de muerte o llamar a la guerra contra el terror.

Pero no deberíamos cerrar el asunto en falso diciendo que el tío está loco. La ultraderecha consigue cada vez más votos, o sea más seguidores, en Europa. El Partido del Progreso noruego, los Auténticos Finlandeses, los Demócratas de Suecia, el Partido Popular Danés. Todos nórdicos. Miembros de las sociedades del bienestar. Modelo de gentes educadas y tolerantes que no arreglan sus problemas a garrotazos. Y ¿por qué tienen éxito esos idearios contrarios a la inmigración, al multiculturalismo? La extrema derecha también es importante en los Países Bajos y en Austria. Le Pen está aquí al lado y su cotización sube entre los franceses.

Vivimos en la cara buena del mundo. No somos víctimas, como los africanos, del terrorismo más atroz nunca inventado: el hambre. Podemos preocuparnos de la falta de horas de sol mientras saboreamos una onza de chocolate. Deberíamos pararnos a buscar las causas de ese odio que la extrema derecha manipula tan bien. No vayamos a creernos que estamos inmunizados.

miércoles, 13 de julio de 2011

Cuando el coro de esclavos toma la palabra...

Esta entrada va de música, de emoción, de catarsis colectiva. Y de reivindicación y de política. Todo junto. Y el resultado es bello. Con la medida que, especialmente, los italianos saben dar a la belleza. Ocurrió en Roma. El día 12 de marzo de este año.

Se festejaba el 150 aniversario de la unificación de Italia y se representaba, en el Teatro de la Ópera, Nabucco, de Giuseppe Verdi. El director era el maestro Riccardo Muti.

Entre los asistentes estaban Silvio Berlusconi, el jefe del Gobierno italiano, y también el alcalde de Roma, Gianni Alemanno. Según cuentan los medios periodísticos, al inicio del acto, el alcalde –que curiosamente es del partido que gobierna y recorta, pero de esas trampas oratorias hablaremos otro día- había subido al escenario para pronunciar un discurso denunciando los recortes al presupuesto de Cultura. (Un 30% menos en los últimos cinco años. El fondo para el mundo del espectáculo se ha reducido a casi la mitad en un año, con los consiguientes cierres, despidos…). Las movilizaciones de protesta contra esos recortes habían comenzado ya en noviembre del 2010, con huelgas en teatros, cines y galerías de arte, manifestaciones y conciertos de protesta.

Hay que recordar también lo que Nabucco significa para los italianos. Tiene su carga política. Verdi la escribió cuando parte del país estaba bajo el imperio de los Habsburgo, contra el que tuvieron que combatir para crear la Italia unificada, y el canto del coro –esclavos oprimidos en Babilonia- evoca esa búsqueda de libertad.

Nos situamos en ese contexto. La representación va genial. El público, muy entregado. Y llega el famoso coro. El “Va' pensiero”. Los esclavos que se lamentan: “Oh patria mía, tan bella y perdida”. Desde el gallinero empiezan a arrojar folletos y la gente enfervorizada grita “Viva Italia” y “Viva Verdi”. Y con sus aplausos solicitan un bis del coro. Pero Muti no es dado a los bises. No le gustan las interrupciones. Sin embargo, toma la palabra, se dirige al público, y ocurre lo que se ve en este vídeo. No sabemos si Berlusconi cantaba o se tapaba los oídos. Once días más tarde, el 23 de marzo, dimitía el ministro de Cultura, Sandro Bondi.


(Traducción de las palabras de Muti: “Sí, estoy de acuerdo con esto:“Larga vida a Italia”. Pero… Ya no tengo 30 años y ya he vivido mi vida. Recorrí mucho mundo y hoy siento vergüenza de lo que sucede en mi país. Así que si accedo a vuestra petición de un “bis” para el “Va' Pensiero” no es por una cuestión patriótica, sino porque esta noche, mientras dirigía al coro y les escuchaba cantar “Ay mi país, bello y perdido”, pensé que si seguimos así vamos a matar la cultura sobre la cual se construyó la historia de Italia. Y en tal caso, nuestra patria, estaría en verdad “bella y perdida”.
Y como estamos en un clima muy italiano, y a menudo Muti le ha hablado a los sordos... Quisiera... Hagamos una excepción. Estamos en nuestra casa, ¿no? En el teatro de la capital. El coro lo ha cantado magníficamente, la orquesta ha acompañado muy bien... Si quieren, les propongo unirse a nosotros para que cantemos todos juntos.”¡Pero todos a un mismo tiempo!”)

martes, 12 de julio de 2011

Sucia política

Vuelvo del oasis de las vacaciones gustosamente disfrutadas y caigo en el desierto de la realidad política.

Los titulares hablan de países que cotizan como bonos basura y de mesas de negociación que no tienen nada que envidiar a los zocos árabes.

Me llama la atención que nadie, nadie, haya dudado de que sea cierto lo que denunció Xabier Agirre el pasado día 7. El candidato del PNV hizo públicas las peticiones de dinero y cargos que les hicieron los de Ezker Batua para apoyar su investidura. Su indignada intervención, en la que no aportó ninguna prueba más allá de su palabra, caló sin esfuerzo en la opinión pública porque la idea de que la política es un foco de corrupción está muy extendida. O sea, que no dijo nada que nos sorprenda. La sospecha de que en el cambio de cromos entran las colecciones particulares de cada uno es común y aceptada. Aunque en sí misma sea algo vergonzoso. Y grave.

En el paro hace mucho frío. La expresión de algunos cargos políticos cuando dejan de serlo muestra bien el pánico al futuro... personal.

La duda es si habrían aceptado de ser las peticiones más comedidas.

domingo, 26 de junio de 2011

Estate


Uda, verano, summer, été... !Qué gozada!
El blog y yo nos vamos de vacaciones. O nos quedamos, pero sin hablar -ni pensar- de política, ni de la crisis, ni de los compañeros de trabajo, ni del precio de la gasolina, ni de nada que suponga esfuerzo... Los próximos días deseo que la decisión más importante sea elegir el sabor del helado y la única cita ineludible, la siesta.
Contra la enfermedad del trabajo, la medicina de la pereza.
Para ir entonándonos, aquí os dejo la viejísima "Sapore di sale" de Gino Paoli, en versión jazz. !Una delicia!

lunes, 13 de junio de 2011

¿Dónde está la Fuente?

Un estadounidense que estudia un máster en Edimburgo ha hecho creer a todos los que leían el blog "A gay girl in Damascus" que era Amina Abdalá, una lesbiana que arriesgaba su vida por contar su día a día en Siria. Desde febrero, ha descrito las relaciones de Amina, su participación en las protestas e incluso su detención. Se llegó a crear un grupo en Facebook, con 15.000 seguidores, para pedir su liberación. Todo era mentira.

Tom MacMaster, que así se llama el embustero, podía haber escrito una novela con el mismo argumento, pero no habría tenido seguidores. El autor del blog está de vacaciones y ahora mismo le viene mal dar explicaciones -quizá esté esperando a conseguir una exclusiva pagada- pero ha pedido, eso sí, disculpas. Cree que no ha hecho nada malo. Admite que se ha inventado a la protagonista pero considera que las situaciones descritas se parecen a la realidad y además, con su engaño quiere llamar la atención sobre la pobre cobertura informativa que se ofrece desde los medios.

Decir que este bloguero me parece un jeta es quedarme corta. Quizá quería poner en evidencia a los periodistas desplazados a Oriente Próximo, pero lo que ha que conseguido es rebajar la credibilidad de la información que flota en Internet. Se ha reído de la buena intención de las personas que se acercaban a su blog, y de los activistas que sí se arriesgan a serlo en el terreno. Y, de paso, ha demostrado que lo de "en la red, todos periodistas" es una falacia. La información sin rigor, sin citar fuentes, sin posibilidad de contraste, no es periodismo, es "otra cosa". Puede ser simple cotilleo, puede ser rumor o ficción... Desinformación, intoxicación... Internet es el patio en el que todos podemos opinar, pero eso no nos hace expertos en nada ¿O alguien piensa que por darle un bisturí a una persona se convierte en cirujano?

La clave siempre está en la fuente. ¿Quién dice qué? ¿Quién es ese quién? ¿Qué intereses tiene en el asunto?

Y la fuente de Anonymous es lo que andan buscando desesperadamente algunos, para secarla. Los venden como los nuevos "terroristas", aunque no nos den ningún miedo. !Qué graciosa la rueda de prensa en la que el policía, tras asegurar que han descabezado la cúpula en España, tiene que recordar que esto no es un juego de chavales sino un delito! Confieso que seguí con entusiasmo las venganzas de Lisbeth Salander en la trilogía de Stieg Larsson y así de memorables me parecen los postulados de Anonymous.

"Nuestro mensaje es simple: no mintáis a la gente, y no tendréis que preocuparos por que vuestras mentiras puedan quedar expuestas. No hagáis negocios corruptos, y no tendréis que preocuparos por que se destape vuestra corrupción. (...)Sabéis que no nos tenéis miedo porque seamos una amenaza para la sociedad. Nos tenéis miedo porque somos una amenaza para el orden jerárquico establecido. (...)"

Enlace para leer íntegro el comunicado de Anonymous a los señores de la OTAN, traducción de Ked Kite.

domingo, 5 de junio de 2011

Una bacteria y algunos cadáveres

Vivimos rodeados de bacterias. Algunas consiguen la fama en base a su peligrosidad. En estos días se habla de la E.coli.

Es evidente que la globalización alimentaria ha favorecido, por el alargamiento de la cadena, el incremento del número de “manos” que manipulan los alimentos. Nos dicen que hay mucho control del etiquetado, mucha trazabilidad, pero después de acusar sin razón a los pepinos, la única recomendación en esta crisis es que cuidemos la higiene.

Es un buen momento para pararnos a pensar en la seguridad alimentaria; que la soberanía de los pueblos también se juega ahí. ¿Qué comemos? ¿Quién lo produce? ¿Dónde? ¿A qué precio? Hay muchos controles sí, pero cuando el viaje es muy largo- y mira que hace kilómetros un pepino de Almeria a Hamburgo- la posibilidad de accidentes aumenta.

Yo sólo compro espárragos navarros. Es como un tic y algunos se me ríen, pero miro siempre en la etiqueta –una letra diminuta- dónde se han cultivado. No los quiero chinos ni peruanos aunque sean más baratos. El consumidor tiene derecho de elección. Es el mantra de nuestra era. Pues bien, elegimos cada vez que compramos. Tomamos partido entre Vía Campesina y la OMC. Entre el slow food y el fast food. Entre colaborar con el sustento del productor cercano o enriquecer a la agroindustria. Yo sólo los compro si son navarros. Que cada uno lo entienda como quiera.

Pero no sólo se habla estos días de muertos por la bacteria. Hay otro tipo de cadáveres que se resisten a dejarse enterrar.

En política el derrotado se queda solo rápidamente. Abandonado por los suyos. Por los que le hacían la ola mientras daba buena sombra. Es comprensible el disgusto. Perder escuece. Pero antes de resultar patéticos, de caer en el esperpento, hay que saber callar.

El -dentro de nada- ex-alcalde de Donostia ha declarado que "la ciudad va a sufrir muchísimo" con la llegada de Bildu. Si gobiernan los que han ganado las plagas bíblicas se van a quedar pequeñas comparado con lo que van a tener que soportar los donostiarras. Todo por no haberle votado a él. Sólo le ha faltado decir que con esos "bárbaros" en Semana Grande no habrá fuegos artificiales.

Es como si al acabar la Liga, un equipo que bajase a Segunda División dijera que eso es el fin del fútbol.

No nos daría ni pena.

domingo, 22 de mayo de 2011

Los votos nulos no van al Sol

No estoy en Sol ni en las redes sociales. Estos días estoy a mi rollo, que ya me tocaba pararme, pero eso no quiere decir que no lea y no me entere.

Me gusta mucho la música del movimiento Democracia Real Ya. Es cautivadora. Un canto a la responsabilidad individual, a la soberanía popular, a la ilusión de una sociedad más justa... Me cuentan los que han estado -eskerrik asko Jabi- que el grado de civismo y compañerismo en las asambleas es ejemplar. Emocionante como catarsis colectiva. Estupendo material para hacer buenos reportajes.

Pero a la melodía habrá que ponerle letra. Esta explosión popular de indignación y de deseo de cambio habrá que concretarla y no me arriesgo nada si digo que ahí empezarán los problemas. La escritora Belén Gopegui ofrece en Rebelión.org un ejemplo muy interesante de lo contradictorio que puede ser un movimiento tan "abierto". Resulta que había en la plaza del Km 0 una pancarta que decía "la revolución será feminista o no será" y "alguien" la arrancó entre los aplausos de "otros alguienes".

Es evidente que los procesos de cambio los impulsan las personas que están en situación de desventaja, pero ni las desigualdades marcan de la misma manera a todos ni las soluciones son únicas. Entre los "desfavorecidos" también hay diferentes sensibilidades. Cuidado con las simplificaciones.

En mi opinión, el mayor error es considerar que no votando se fastidia a los grandes partidos, a los mercados, y los responsables de la crisis. Mientras se mantengan en el poder todo lo demás les da la risa.

Bienvenida sea la ola de indignación si sirve para concienciar pero no nos engañemos: los votos nulos y blancos no van al Sol, van directamente a la basura.

Igual es que en Euskadi es diferente y aquí la indignación sí tiene opciones... Yo, desde luego, voy a votar y !qué a gusto me voy a quedar después!

lunes, 16 de mayo de 2011

Sonamos como nos movemos

Ha fallecido Pedro San Martín, bajista de La Buena Vida, en accidente de coche. Tenía 39 años.



Sólo tienes lo que das
Sólo en tus ojos el color,
sólo en tus manos el calor
y es que nada puede ser mejor
que vivir al día y con amor
por si fuera tarde, mi vida.
Sólo en tus labios el color,
son esos momentos de ilusión
y es que nada puede ser mejor
que vivir al día y con amor
no quiero perderte, mi vida
y si nada puede ser mejor,
cómo es que en tu vida no hay amor
no lo entiendo
debe ser el aire y tal vez el agua
azul marina, azul marina.
Cada vez que lloro tú te vas
y me dejas solo, qué más da
el por qué lo haces tú sabrás,
sólo veo en ti la soledad
duerme con dulzura, mi niña
y si no pudieras descansar
cuéntame que yo sabré escuchar
lo que quieras
debe ser el aire y tal vez el agua.

lunes, 9 de mayo de 2011

La democracia está desnuda

Y no hay ningún niño inocente que se lo suelte a la cara, como al rey del cuento.

En estos días, todo un señor nobel de la Paz defiende la venganza política, el asesinato extrajudicial –podían habérselo cargado igual, tras el juicio; en EEUU está vigente la pena de muerte- y de colofón, justifica la tortura.

¡Qué miedo y qué horror! ¡Y qué asco!

Lo último en manipulación es sacar vídeos caseros del enemigo. Demostrar su pequeñez: ¡se teñía las canas! Creen que somos idiotas. Que pueden convertir la muerte en espectáculo a distancia y no nos vamos a dar cuenta. De hecho, ya hay disponible un videojuego donde puedes ser soldado de las SEAL, el comando de élite que ejecutó la operación. Al mismo tiempo, haremos jornadas de expertos para discutir cómo proteger a los niños de la violencia de la televisión ¿Y la bárbara realidad? ¿Cómo nos defendemos de quien marca la línea entre el bien y el mal?

Hemos crecido viendo linchamientos en las pelís del Oeste, guerras de Cruzadas, brujas autoinculpadas bajo tormento. Historias de la Historia. Pero resulta que están aquí mismo, al otro lado de la pantalla.

Un voto, sólo uno, puede decidir sobre los derechos “democráticos” de miles de personas. Como quien deshoja una margarita. Tú terrorista, tú no, tú ya veremos…

Y nos dicen que todo lo hacen por nuestro bien. (La excusa del padre maltratador que golpea a su hijo. “Me duele más a mí”). Es para que estemos más seguros. Y de paso, para que aprendamos de una vez, si no lo hemos hecho ya en la escuela y en el trabajo…, que el más fuerte siempre gana y además, tiene razón.

No quieren que veamos que el rey está desnudo. El miedo funciona como pegamento invisible y de contacto; así, todos acojonados, adoramos la monarquía.

Indignarnos no es suficiente. ¡Viva la república!

domingo, 17 de abril de 2011

Restiamo umani

“Seguimos siendo humanos”. Esa es la traducción al castellano de “Restiamo umani” el título bajo el que Vittorio Arrigoni publicó, en formato de libro, sus crónicas para el periódico italiano Il Manifesto. Fueron escritas durante la “Operación Plomo Fundido”, a finales de 2008, cuando el Estado de Israel bombardeó a los habitantes de la Franja de Gaza. Se han traducido a varios idiomas. Su prólogo, "Gernika en Gaza" comienza así: "Desde Israel llega una amenaza terrible: este es sólo el primer día de una campaña de bombardeos que podría prolongarse durante dos semanas. Construirán un desierto y lo llamarán paz. El silencio del mundo es hoy mucho más ensordecedor que las explosiones que cubren la ciudad como un sudario de terror y muerte. Seguimos siendo humanos."

Activista del Movimiento de Solidaridad Internacional (ISM en sus siglas en inglés), Vittorio Arrigoni fue secuestrado el pasado jueves y asesinado horas después. Al parecer, un grupo islamista radical que solicitaba a Hamas la liberación de su líder habría sido el responsable del secuestro. Colgaron un vídeo en Youtube en el que se puede ver al joven italiano con los ojos tapados y signos de haber sido maltratado. Los palestinos no pueden creérselo. Y algunos comentaristas de foros, que tampoco, señalan la mano secreta de Israel.

Vittorio llevaba en Gaza desde 2008, cuando llegó a bordo de una nave que rompió el bloqueo. Lo suyo era la resistencia. Luchaba contra la ocupación y se ofrecía como escudo humano a agricultores y pescadores palestinos intentando protegerles con su presencia. Publicaba sus denuncias en un blog Guerrilla radio. Aún palpitan su última crónica, escrita la víspera de su secuestro, ("Cuatro palestinos muertos en el túnel de la supervivencia de Gaza") y los mensajes de solidaridad que van dejando sus compañeros y amigos.

En algunos periódicos de gran difusión he leído que Vittorio "no era un periodista profesional". Lo dicen los corresponsales repartidos por la zona. No sé si se refieren a que no estaba licenciado o a que no cobraba de un medio de comunicación. No estoy de acuerdo. Si algo mide a la persona es lo que hace y no lo que dice ser, y Vittorio cada día buscaba la verdad y la contaba. Sin estar en nómina más que de su propia conciencia. No sólo era periodista sino que era un romántico. Creía que el mundo se puede cambiar a mejor. Porque el seguía siendo humano.

En este vídeo contesta a otro escritor italiano, Roberto Saviano, que había participado en una manifestación a favor de Israel.

domingo, 10 de abril de 2011

El "yo" egoísta de los eurodiputados

Esta semana ha habido, al menos, una noticia divertida. Esa de que los eurodiputados se niegan a congelarse el sueldo y a viajar en clase turista. Para sorpresa de todos los europeos que sufren las medidas de austeridad, los parlamentarios han tumbado varias enmiendas que reclamaban contención en el presupuesto de la Eurocámara para el año que viene, y que habían sido presentadas por los Verdes y por Izquierda Unitaria. Hubo 402 votos en contra frente a 216 a favor y 56 abstenciones. De los que suenan por aquí, sólo cuatro, -catalanes- votaron a favor de perder ciertos favores.

Rápidamente, en Twitter se dieron cita los ofendidos y la etiqueta "eurodiputados caraduras" subió enteros por unas horas. A algunos jefes de filas les dio vergüenza el revuelo y los hay que van a cambiar su voto negativo por una abstención. Y ya está. Al final va a ser que las redes sociales sirven para eso: para desfogarse un rato, para evidenciar el cabreo. Estaréis conmigo en que de ahí a la revolución queda un largo trecho...

Pensemos. ¿Qué habría votado la mayoría de los indignados twitteros? No esa docena de coherentes con conciencia, que en todas partes los hay -recuerdo que cuatro eurodiputados catalanes votaron a favor- sino la mayoría, la que nos encontramos en el Metro. Yo creo que muchos habrían votado a favor de sí mismos. Como los eurodiputados. ¿Quién no va a preferir viajar en business, con espacio para estirar las rodillas, aperitivo y periódicos, si además el billete sale de la hucha común y no del sueldo?

A los eurodiputados les preguntaron y antepusieron sus intereses personales a todo lo demás. Les pudo su "yo" egoísta.

Hace un par de semanas se celebró en Donostia una nueva edición de Diálogos de Cocina, un congreso internacional bienal que congrega a prestigiosos expertos de todo el mundo. Es un lujo de encuentro al que cualquiera no puede asistir pero sí acceder por Internet. Todo lo que se dijo es de interés, pero uno de los conferenciantes que más entusiastas seguidores provocó fue Fidel Delgado. Si tenéis un rato, merece la pena escuchar su intervención sobre el surtido de yoes disponible.. Es una delicia.

Volviendo al tema de los aviones, a mí se me ocurre otra opción que también lograría muchos seguidores: eliminar la clase turista. Todos en primera. ¿Qué no llega? Pues viajamos menos. Estos diputados tan despilfarradores podían quedarse allí de vez en cuando a pasar el fin de semana. Pero ¿por qué limitarse a ahorrar en vuelos? Yo eliminaría los coches oficiales de todos los cargos de las administraciones públicas. El sueldo debería llegarles para pagarse su propio transporte. Los trabajadores lo hacen. Incluso podrían desplazarse en transporte público y dar ejemplo.

Hoy me he debido despertar con el "yo" rebelde subido. Porque no tengo Twitter, que si no la monto.

domingo, 3 de abril de 2011

Sin amantes se puede vivir

Sin amigos no. Esta era la frase preferida de un colega que, quizá porque tenía más amantes ocasionales que amistades fijas, lloraba su soledad en cuanto se empapaba de alcohol.

Seguramente tenía razón. El amor está sobre valorado y la amistad, en su humildad, es más consistente.

Pasas tiempo sin ver a personas que aprecias y los encuentras desmejorados, cansados, con la sombra de los años ocultando su brillo. Y a ti te ven igual, claro. Hablas de cosas insustanciales, bromeas, te tocas, te abrazas. Y al rato, ya les ha cambiado la cara. Como si la edad se hubiera detenido en los 13 años y todos siguieran, siguiéramos, siendo adolescentes con una vida por jugar.

Los amigos no te prometen la eternidad y sin embargo duran siempre. No te juzgan. Sólo se ríen contigo -a veces, también de ti-, desde el cariño. Están ahí, como el paisaje al fondo de una fotografía. Cuando los buscas se dejan encontrar. Y si te despistas te recuerdan el camino.

Realmente, tiene que ser insoportable una existencia sin amigos. Mi colega llorón tenía motivos para quejarse.

domingo, 20 de marzo de 2011

Chatarra radioactiva

Chatarra radioactiva eso es lo que quedará del planeta si la avaricia del ser humano, de algunos seres humanos, no encuentra enfrente cantidades industriales de sentido común. Del que usan los antinucleares.

Los japoneses conocían el peligro atómico en sus propias carnes. La destrucción, el horror y las víctimas de los bombardeos atómicos sobre Hiroshima y Nagasaki llevó a Japón a adoptar los tres principios antinucleares: de no producción, de no posesión y de no autorización de armas nucleares sobre su territorio. Sin embargo, si utilizaban – utilizan- con profusión, la energía nuclear. Un terremoto seguido de un tsunami ha dejado en evidencia lo que ya se sabía pero no se quería pensar: un accidente en una central nuclear es un escenario aterrador donde el ser humano se encuentra de golpe con sus límites.

La radiación ha entrado ya en la cadena alimentaria. Y seguirán diciendo que no es peligroso. Y que la energía nuclear es imprescindible si queremos mantener los niveles de consumo. Nos asustarán con que hay que aceptar el riesgo si no queremos volver a las cavernas. Digo yo que mejor será apagar la luz que apagar la vida.

¿Y por qué les creemos? ¿Pero es que no hemos tenido ya suficientes pruebas de que el poder miente? Miente. Miente siempre que la verdad no le beneficia.

Hoy he visto en Mundo.Hoy (ETB2) el documental La guerra que nunca se ve, de John Pilger. Un reportaje excelente sobre el papel de los medios y los periodistas en las guerras. Periodistas empotrados, propaganda militar, campañas de desinformación... Se escucha decir, cuando lo de Hiroshima, que la radiación no producía enfermedades...

He intentado enlazar con el reportaje, pero no lo he encontrado en la página de EITB a pesar de que la presentadora ha dicho que estaría colgado una semana en la Web. Quizá mañana esté accesible. También hay información sobre el documental en la página de John Pilger. Merece la pena.

domingo, 6 de marzo de 2011

Las palabras gastadas necesitan reparación

Me ilusiona ver que hay accesos a este blog aunque no lo renueve. Es vanidoso por mi parte, lo admito, pero hace ilusión que alguien te pregunte ¿qué has hecho en febrero, que no escribes? como si esto no lo hiciera en la esquina del resto de mi ocio. O sea, cuando he acabado con todo lo demás. Perder el tiempo que me sobraba. Eso he hecho. Dejarlo correr. Es muy beneficioso para la salud emocional, de vez en cuando, no hacer nada de nada.

Y es que estoy estresada. Lo noto en que por momentos la actualidad me cansa, por poco novedosa, por repetitiva, por predecible...Por mezquina. Por tremenda. Por horrible.

Leo de una joven mexicana que se declara en huelga de hambre porque quiere conseguir una invitación para la boda del príncipe William y Kate. O miente, y no está dispuesta a morir, o tiene muy poco aprecio por su vida. ¿Tiene sentido que nosotros demos importancia a algo que ella no valora? Por mí, que se muera… (Piii. Políticamente incorrecto).

Me incomoda la hipocresía verbal. Habría que hacer un diccionario con palabras y expresiones que han perdido su sentido. Intimidad, por ejemplo, es una palabra cada vez más vacía. Desde que los teléfonos móviles son una plaga cualquiera va contando sus secretos en voz alta en el tranvía. Hace unas semanas, escuché, con todo detalle, el tratamiento de fertilidad de una chica que estaba en crisis con su pareja. (¡Menudo rollo que se marcó la muy pesada!)

Pero las hay aún más vacías. Demócrata es de las más devaluadas. Se podría decir que es una etiqueta adulterada desde el origen. El reparto de este calificativo durante la Transición no fue riguroso. Y algunos de los que se apoderaron de la palabra sin merecérselo andan ahora escatimándosela a otros. (Manda huevos… que dijo el ministro).

Palabras sin significado. Discursos vacíos. Mentiras oficiales que van modelando la opinión pública. Y tragar y tragar, cosas cada vez más inverosímiles.

Una última acepción por hoy: Tormento. Es una palabra terrorífica. Espeluznante. Y muy actual. No hay que remontarse a la Inquisición española para documentar casos de tortura. Pero se obvia. Se pretende conseguir el borrado por omisión. Como me dijo una vez un taxista chileno hablando de los desaparecidos durante el “gobierno del general” (la dictadura de Pinochet, para entendernos) “aquel que no se buscaba problemas no los encontraba”. Si lo ignoramos nos podemos convencer de que no va con nosotros…

Yo también estoy gastada. Tendré que seguir con la vida contemplativa.

domingo, 13 de febrero de 2011

Celebremos el amor...

pero no San Valentín. Quizá en algún lugar sea una tradición con solera pero por aquí es una imposición comercial. Mientras nos empujan a la búsqueda del regalo perfecto - como si el amor en sí mismo no fuera un regalo- desde la página web "Quiero a Barbie" llaman a una "gran besada", en la Plaza de Callao de Madrid, para que los famosos juguetes Ken y Barbie se reconcilien y vuelvan a ser pareja. Los convocantes quieren que la relación entre los muñecos, que terminó para la compañía que los fabrica hace cinco años, se reanude.

Espero que no acuda nadie.

Celebremos el amor todos los días y porque nos da la gana. Con besos -el maestro Jude Law nos deja un ejemplo- y canciones - de Tonino Carotone, todo un filósofo del tema-.

Por que no han de saber
que te amo vida mía
por que no he de decirlo
si fundes tu alma
con el alma mía

que importa si después
me ven llorando un día
si acaso me preguntan
diré que te quiero
mucho todavía

se vive solamente una vez
hay que aprender a querer y a vivir
hay que saber que esta vida
se aleja y nos deja
llorando quimeras

no quiero arrepentirme después
de lo que pudo haber sido y no fue
quiero gozar de esta vida
teniéndote cerca
de mí hasta que muera






Jude Law y Julia Roberts en "Closer"

domingo, 30 de enero de 2011

Strange things will happen

Adoro esta canción.





Today was a pretty day
No disappointments
No expectations on your whereabouts
And oh, did I let you go?
Did it finally show that strange things will happen if you let
them?

Today I didn't even try to hide
I'll stay here and never push things to the side
You can't reach me cause I'm way beyond you today

Today was a pretty day
Autumn comes with
These slight surprises where your life might twist and turn
Hope to unlearn
Strange things will happen
If you let them come around and stick around

Today I didn't even try to hide
I'll stay here and never push things to the side
Today I didn't even look to find
Something to put me in that peace of mind
You can't touch me cause I'm way beyond you today

domingo, 23 de enero de 2011

Críticas feroces y mucha pasividad

Leo que un banquero suizo ha entregado a Wikileaks datos de dos mil sospechosos de evasión fiscal. Al parecer, había intentado darle los documentos al ministro de Finanzas alemán, sin éxito. Se dice que entre los evasores figuran 40 políticos. ¿Será el inicio del mundo al revés de Goytisolo? ¿Con lobitos buenos y banqueros honrados?

Pronto veremos las vergüenzas financieras de algunos al aire. ¿Y qué más? Otra vez nos conformaremos con que el escándalo y el cabreo por las revelaciones nos produzcan una urticaria ¿Cuando dejará el desengaño de ser pasivo y pasaremos a exigir responsabilidades?

Hace dos días, en un autobús urbano, de forma espontánea, a raíz de una conversación privada –sobre la jubilación a los 67- escuchada por todos los presentes, la gente se calienta y empieza una letanía contra los políticos y su labor. Si el malestar se cristalizara en algo más que quejas… ¿Cuántos de esos protestones irían a una manifestación para decir lo mismo en voz alta? ¿Cuántos participarán en la huelga del 27?

Un par de semanas atrás, trayecto de veinte minutos escuchando la diatriba de un taxista indignado, profundamente enfadado, por las consecuencias de la crisis para su bolsillo y la inutilidad de los políticos a los que había votado y le estaban llevando a la ruina. “!Me estoy gastando los ahorros para sobrevivir!”. Quería venganza. Añoraba un líder como Le Pen, estaba dispuesto a montar un grupo paramilitar para liquidar “a unos cuantos políticos sinvergüenzas”. Decía sus nombres. Se confesaba dispuesto a matarlos él mismo.

Tal alterado estaba, tan salido de sí, que se equivocó y me dejó en otra dirección. Me lo tomé bien. Prefería caminar que seguir escuchándole, pero se percató de su error y volvió para recogerme y llevarme al final de la calle. Se disculpó, avergonzado. En otras circunstancias, en otro momento –me contaba- él había votado a la izquierda, pero ¡lo estaban haciendo tan mal! Parecía un amante despechado.

Yo pensaba que si esas mismas declaraciones las hiciera no un taxista madrileño con plaza en Barajas sino uno vasco, en otro contexto, podría acabar en la Audiencia Nacional.

Así son estos días, de ideas perseguidas y exaltaciones jaleadas. Igual es que nos prefieren salidos de madre, lanzando feroces críticas alrededor de la máquina del café, como si las restricciones a los derechos, las reformas a la baja, los ataques al pensamiento crítico fueran inevitables, una plaga bíblica. Y después del desahogo, cada uno a lo suyo, “a ver si yo me libro, a ver si no me toca”, que es la manera más segura de que nada se mueva.

domingo, 2 de enero de 2011

Hoy puede ser un gran día...

Si se cumple la ley antitabaco que entra en vigor y, por fin, los no fumadores nos libramos de la imposición del humo ajeno. Va a ser un sueño salir de marcha y no volver con el nauseabundo olor pegado a la ropa, al pelo…

Hay voces muy ofendidas que llaman a concienciar más y prohibir menos. Les parece muy drástico esto de poner una fecha y amenazar con multas. ¿Cuántas prórrogas más necesitan a costa de mis pulmones?

Desde 2005, cuando se aprobó el primer intento, ya hemos tenido tiempo de comprobar que hay adictos a los que les rebotan los avisos. Generalizar no es bueno. Entre los fumadores, como en el resto de colectivos, hay de todo. Pero entre ese de todo yo he conocido bastantes maleducados. Así pidieras, por favor, una tregua, seguían a lo suyo. Pretender respirar un aire no viciado suponía, a veces, librar una batalla en la que el bando fumador se negaba a aparcar el vicio, por ejemplo durante la hora de clase, y los anti-tabaco atacaban abriendo las ventanas, así hubiera 0 grados en la calle. Y ahora quieren darme pena. La verdad es que los no fumadores hemos vivido acogotados.

Recuerdo a una amiga, Rosa, que entró a trabajar en un puesto de la Administración. Era una imprenta ubicada en un sótano, sin ventanas ni luz natural. Un verdadero agujero. Los compañeros fumadores no sentían que les faltara el aire, pero visto que eran muchos los adictos y ante la imposibilidad de ventilar aquella estancia que a media mañana ya estaba cargadísima, la jefatura decidió que había que fumar en la calle. Así que cada hora disponían de unos minutos de descanso para echar el pitillo. Los no fumadores no podían salir. Rosa protestó. Ella también quería separar la mirada de la pantalla, estirar las piernas… Nada; si no se fumaba no se justificaba la pausa. Al cabo de unos meses, Rosa empezó a fumar.

Así de comprensivos hemos sido con los adictos al tabaco. No se les reconoce el mismo derecho a los que dependen del alcohol o de la siesta para estar a gusto.

Algunos fumadores piden más tolerancia e intentan pontificar sobre lo mala que es la imposición. “No habría que prohibir nada” dicen. Sería genial que todos respetáramos al de al lado. Que antes de hacer cualquier cosa en un lugar público -escupir o hablar por el móvil- pensáramos en los que nos rodean. Pero no funciona. Sólo hay que coincidir con alguien que entra a un ascensor fumándose un puro para saberlo.

Además, resulta que la vida en sociedad, en esta sociedad, se regula con prohibiciones. Está prohibido coger el coche de otro para darse una vuelta, aunque estés muy cansado y tengas luego intención de devolverlo. Si sientes hambre, -necesidad de primera-, no puedes entrar a un súper y llevarte un paquete de almendras sin pagar.

El debate sobre los límites de la ley es un debate sobre los límites de la libertad, ajena y propia. Yo estoy de acuerdo en que hay muchas maneras de vivir y de morir. Y es cosa de cada uno la que elige. Pero cuando fumas a mi lado me haces fumar a mí. Y no, a eso no tienes derecho.

La tiranía de los fumadores ha durado décadas. Celebro que se acabe.